Doom

Título Original: Doom.
Género(s): Ciencia Ficción, Terror.
Director: Andrzej Bartkowiak.
Emisión: 2005.
Duración: 105 minutos.
Extras:

Adaptada de forma libre a partir del popular videojuego del mismo nombre, Doom es una película de Ciencia Ficción y Terror que aborda el tema poco explotado de la Exoarqueología y que además retoma elementos clásico del terror espacial que fuese popularizado con Alien a finales de los 70 y con leven reminiscencia al videojuego pero que no está pensado para satisfacer a los jugadores de dicha franquicia sino que está enfocado en un público más general al que le gustan las películas de acción.

La historia tiene una buena calidad en cuanto a lo visual, aunque por momentos el CGI luce algo artificial, sin embargo, la construcción de los escenarios y el uso de la banda sonora logran ambientar perfectamente las escenas y logran generar esa tención que mantendrá al espectador pegado a la pantalla. El desarrollo de personajes está bien, las actuaciones no son las más formidables pero cumple, aunque resulta curioso que la construcción de los personajes retome mucho la forma en que se hacía en la década de los ochenta, con películas como Depredador, pues aquí también tenemos a un grupo de hombres rudos y musculosos con diversas personalidades que van de lo ración a lo violento, y que no duda en enfrentar el peligro.

La historia toma lugar en Marte, en el año 2046. Veinte años antes un grupo de arqueólogos encontró un portar al que llamaron “El Arca” que lleva hacia el planeta rojo y desde entonces han estado realizando excavaciones arqueológicas en ese lugar y han descubierto una raza de humanoides con capacidades superiores a las nuestras, sin enfermedades, con gran fuerza e inteligencia y extremo poder de sanación. Dicho poder a parecer se debe a un gen extra que implantaron artificialmente en sus cuerpos.

Los problemas inician cuando algún experimento se sale de control y algo empieza a atacar y matar a los científicos. Las instalaciones de Olduvai, centro de investigación marciano, son puestas en cuarentena y un grupo de marines en enviado allá para recuperar el control de las instalaciones. Al llegar los soldados buscan a los científicos atacados, pero sólo encuentran cuerpos y a uno de ellos que parece estar totalmente trastornado. La Arqueóloga Samantha Grimm, hermana de uno de los marines, les explica la situación y entra con ellos a la zona aislada donde ocurrió el incidente para recuperar la información de sus investigaciones. Durante su travesía, unas extrañas criaturas empiezan a atacarlos, son unos seres grandes, fuertes y muy rápidos.

Sin saber qué pasa ni qué son esas criaturas, los soldados deberán tratar de recuperar el control de las instalaciones, mantener la cuarentena en Olduvai y, sobre todo, evitar que esas criaturas salga y lleguen al Arca, pues de llegar a la Tierra podrían en peligro a muchas personas. Como es de esperarse muchos soldados van muriendo a manos de las criaturas mientras poco a poco se va develando el secreto de su origen y su relación con las investigaciones secretas que realizaban en ese lugar.

Hay tres aspectos que me parece pertinente mencionar. Una de ellas es el tema de la exoarqueología, donde un grupo de científicos investigan los restos de lo que parece ser fue una próspera civilización extraterrestres además de que se mencionan otras disciplinas como la Antropología, la Arqueología Forense y la Genética. El realizar arqueología en el espacio es algo que ha llamado mi atención en los años recientes, pues como arqueólogo y fan de la Ciencia Ficción sería algo muy interesante de hacer y que si bien ya hable se eso en un Plásticas de Ciencia Ficción, planea volver a hacerlo pronto. El segundo punto es esa alusión que se hace a los videojuegos de disparos el primera persona (First Person Shooter) cuando uno de los marines que adopta el protagónico al final del filme se enfrente a las criaturas restantes en una intensa y emocionante escena en primera persona, algo común en los videojuegos pero muy raro en cine y que le da un toca independientemente de los fiel que sea a la historia del juego en sí (el cuál, por cierto no he jugado).

El tercer punto es justo el manejo del escenario que es completamente similar a lo que hace Alien en su tetralogía clásica. Vemos las instalaciones de Olduvai como un laberinto industrial y oscuro que nos recuerda mucho al Nostromo y que genera un excelente uso del espacio confinado, el que quizás es el elemento más característico de lo que se ha definido como Terror Espacial. Como fan de la saga de Alien, el Terror y el uso del espacio confinado me gustó mucho ese aspecto en el filme.

The Rock, Karl Urban (quien me parecía conocido pero no recordaba ya haberlo visto en El Señor de Los Anillo y Dredd) y el resto de Marines funcionan bien pues sus estereotipos se adecuan con lo que uno espera ver en una película de acción donde hombres grandes y fuertes hace uso de la violencia extrema para neutralizar una amenaza, lo cual, como ya mencioné, me remite mucho a ese grupo de soldados que se internan en la selva comandados por el Sargento Dutch en Depredador.

En cuanto al diseño de las criaturas puedo decir que es igualmente bueno, aterrador y visceral como se espera de este tipo de películas, con monstruos gigantes y muy fuertes que resultan rivales muy superiores a lo que los marines esperaban enfrentar. Y no olvidemos su origen y eso que hacen llamar xenogénesis. Aunque claro que eso cae en el típico cliché del secreto militar y las investigaciones secretas de una compañía sin rostro, pero tampoco es algo que podamos criticar, esta película se ve para disfrutar la acción y la tensión del peligro y no tanto por su profundidad argumental, aunque en cuanto a lo arqueológicos si tiene tela de dónde cortar.

La película es buena, genial para pasar la tarde viendo una película de acción con algo de complejidad argumental, el suficiente misterio para atraparte, criaturas mortales, armas y disparos. Tampoco es la gran obra del Terror espacial pero si me resultó muy entretenida, y como no he jugado el videojuego no puedo comentar nada con respecto a eso, pero sin duda es una película para ver por separado y no para asocial con la franquicia de juegos a pesar de llevar el mismo nombre.

Survival-Horror

REC (Jaume Balagueró y Paco Plaza, 2007)

Nota: el siguiente es un ensayo sobre el Survival-Horror como género cinematográfico o televisivo y puede diferir del género de videojuegos en varios aspectos.

El también llamado Horror de Supervivencia es un género nacido de la escena gamer y popularizado gracias a franquicias como Resident Evil y Silent Hill. El bum de los videojuegos en la última década del siglo XX y la primera del XXI, su salto a la pantalla grande y la dinámica social que empezó a reflejar sus frustraciones en las cintas de Superhéroes y Zombis, coadyuvaron a popularizar el género.

A continuación la definición de lo que yo considero es Survival-Horror:

El Survival-Horror es un subgénero nacido directamente del Horror, el Gore y la Ficción. Sus temáticas suelen centrarse en un grupo de personajes que deben sobrevivir a algún tipo de catástrofe apocalíptica sobre la que no tienen control y de la cual no pueden escapar.

PANTALLAS VS CONSOLAS

Si bien el Survival-Horror (SH) nace en los videojuegos y se considera un género nato allí, algunas series de televisión y películas han empezado a desarrollar historias basadas en las premisas que popularizaron los juegos. Con ello se generó un estándar en las producciones de los últimos años dentro de género del Horror, que mostraban historias enfocadas en la acción y el suspenso que tanto atraían a los jugadores y que rápidamente engancharon al público juvenil no sólo en la escena gamer.

Como género de videojuegos, el SH presenta características que van desde el desarrollo de la historia, hasta la creación de personajes, pasando por el manejo de escenarios y la dinámica en la perspectiva (o juego de cámaras), que en su conjunto introducen al espectador dentro de la acción y lo mantienen en tal tensión que le resulta inevitable saltar frente a cualquier sorpresa (qué es la dinámica clásica del género del Horror). Sin embargo, a diferencia de lo que pasaba en las consolas, el séptimo arte y la televisión crearon historias genéricas que seguían un patrón muy repetitivo. El SH, al menos dentro del cine, no es un género propiamente hablando, es más la dinámica entre los personajes y su entorno en relación con el género madre que guía al filme, que generalmente es Terror, Horror o Ficción Especulativa Apocalíptica.

Silent Hill (Christophe Gans, 2006)

HORROR, TERROR Y MIEDO

Para entender mejor éste género, debemos conocer sus raíces, es decir, lo que le da su nombre. El SH es un subgénero del Terror, el cual se enfoca en provocar tensión en los espectadores (no confundir con Thriller) y asustarlos con alguna escena sorpresiva o apelando a la impresión visual, generalmente recurriendo al Gore. El Horror, que no es lo mismo, busca generar miedo o pánico, pero a un nivel más psicológico, provocando que en ocasiones nosotros mismos nos asustemos sin la necesidad de que se nos muestre una escena atemorizante.

El término como tal fue adoptado por el mundo hispanoparlante sin traducción y extraído directamente del mundo de los videojuegos. Si nos propusiéramos dar una traducción con base en nuestra lengua y los géneros de los que deviene, deberíamos llamarlo Survival-Terror o Terror de supervivencia.

Como el género mayor del SH es precisamente el Terror, resulta muy común que se produzcan mezclan con otros géneros. Dentro de la escena cinematográfica tenemos que muchas veces es un género externo el que guía o da pauta tanto al argumento principal como al desarrollo general de la historia. En la película Zombieland (Ruben Fleisher, 2009) tenemos que la Comedia guía al filme, en Planet Terror (Robert Rodríguez, 2007)  el Splatter es el eje rector, mientras que en Carriers (Àlex Pastor y David Pastor, 2009) reinan la Ficción Especulativa y el Drama.

Con base en su relación con otros géneros, podríamos aventurarnos a decir que el SH es un Exploitation del Terror, porque de cierta forma sí lo es. Sin embargo, el Cine de Explotación ha sobreexplotado por sí mismo al Survival-Horror, desgastando muchas de las temáticas y dinámicas clásicas.

Zombieland (Ruben Fleisher, 2009)

DINÁMICA DE SUPERVIVENCIA

Con lo dicho anteriormente aún resulta muy ambiguo saber qué pertenece al SH, podríamos pensar que es cualquier obra en donde los personajes deban luchar por su vida contra algo que cause terror sin importar de qué género sea. Esto no es así, películas como Hostel (Eli Roth, 2005) o Saw (James Wan, 2004) muestran gente en situaciones horribles tratando de sobrevivir, y aunque no está bajo su control evitarlo, las películas se descartan del género por la simple razón de que existe un villano que provoca su sufrimiento.

Para pertenecer al SH no sólo debe haber Terror de fondo, debe desarrollarse una dinámica de supervivencia que forcé a los personajes más allá de sus límites, obligándolos a cometer actos que normalmente no harían con tal de tener un día (o unas horas) más de vida. Además, no debe existir un personaje antagónico (o villano) que provoque la situación de supervivencia, debe ser una catástrofe que se haya salido de las manos y no pueda ser controlada, obligando a los personajes a aferrarse a la vida haciendo uso de toda su fuerza, ingenio o sentido común para poder sobrevivir. Cabe aclarar que un gigantesco monstruo arrasando una ciudad no es un personaje en sí, es básicamente la situación.

Durante la historia, los personajes generalmente deben resolver problemas que no estaban previstos, apelando no sólo a su fuerza física, sino a su intelecto. En el Survival-Horror los sobrevivientes debe elegir entre lucha o huir, esconderse o hacerle frente a la situación, y aferrarse a la vida o dejarse morir.

Filosófica e históricamente el conocimiento ha sido el arma más poderosa, dentro del género que nos compete es una constante ver que los personajes desconocer la situación, no saben a plenitud qué es lo que pasa y mucho menos si esto les puede causar algún daño. La falta de información es básicamente lo que hace entrar en pánico a los personajes y los obliga a cometer errores, esto lo podemos ver de manera muy obvia en The Happening (M. Night Shyamalan, 2008). En una situación de supervivencia es importante saber cómo reaccionar ante la amenaza, pero si no sabemos qué es lo que pasa no podremos reaccionar correctamente, actuaremos por instinto y eso es lo que genera esa dinámica tan particular entre los personajes y su forma de enfrentar la situación.

Correr y Disparar. La dinámica clásica de los videojuegos era correr y dispara, atacar al enemigo, debilitarlo y huir antes de que pueda contraatacarnos. Muchas películas y series se basan en este principio, pero en menor medida, recordemos que generalmente los personajes no tienen la fuerza necesaria para defenderse ni atacar, teniendo únicamente como opción el correr y esconderse. La diferencia primordial entre juegos y películas es que en los primeros tenemos el recurrente uso de tomas en primera persona (POV), que sumergen al jugador dentro de la acción. Esto es muy poco usado en el cine, el filme Doom (Andrzej Bartkowiak, 2005) hace uso de este recurso visual pero es porque se basa en el videojuego del mismo nombre. Aquí no debemos confundirnos con el Falso Documental ni las tomas de cámara en mano como en Cloverfield (Matt Reeves, 2008).

Planet Terror (Robert Rodríguez, 2007)

APOCALIPSIS Y REFUGIO

El elemento apocalíptico es sin duda el más recurrente en este tipo de filmes, pues básicamente en cada obra se nos presenta una situación del fin del mundo. El hecho de que el apocalipsis sea global es lo que hace tan atractivo a este género, pues no importa que hagan los personajes ni a dónde se dirijan, no encontraran otra cosa más que desolación y muerte. El no tener un lugar para esconderse o estar a salvo enfatiza el elemento de supervivencia o en su caso buscar dicho paraíso se convierte en la meta final de la travesía. Asimismo, la constante de estar acorralado enfatiza la frustración y eleva la tensión en los espectadores, como podemos verlo en Dawn of the Death (2004) y Land of the Dead (2005), ambas de Geroge A. Romero, y en The Walking Dead (Frank Darabont, 2010), donde los protagonistas buscan incansablemente un lugar dónde estar a salvo.

Si bien al holocausto puede no ser mundial, el entorno dentro del cual se mueven los personajes está totalmente afectado y les impide estar a salvo. En Cloverfield la ciudad de Nueva York está en peligro y en REC (Jaume Balagueró y Paco Plaza, 2007), a pesar de que todo acontece en un edificio, no hay habitación en la que puedan estar seguros.

Land Of The Dead 2

VÍVERES, ENEMIGOS Y CORDURA

El elemento apocalíptico no sólo sirve para generar un escenario desesperanzador, también sirve para hacer aún más estresante la dinámica de supervivencia, pues la obtención de recursos (armas y alimentos principalmente) se convierten en la necesidad principal que debe ser satisfecha incluso antes que la seguridad personal. Salir en busca de suministros siempre implicará exponer la vida a los peligros del camino o en su caso luchar por ellos contra otros sobrevivientes.

Además de los zombis, engendros o virus a los que se deba sobrevivir, el gran enemigo a evitar son las otras personas, quienes harán lo que sea para estar a salvo aún si eso incluye acabar con nosotros. En muchas obras de este tipo los sobrevivientes generalmente se unen e intentar salir adelante juntos, pero eso no los exime de sufrir problemas dentro del mismo grupo ni contra otras personas, como lo vemos magistralmente en The Walking Dead.

El vivir a un ritmo tan estresante, tener que lidiar con todo tipo de enemigos y la falta de recursos, llevan tarde o temprano a la locura. Mantener la cordura y la esperanza es una de las claves para seguir vivo, tener porqué luchar es quizás la principal razón para no dejarse morir y es por eso que muchas veces los personajes simplemente dejan de intentarlo. Cuando todo está acabado, cuando ya no hay esperanza y cuando pareciera que todas las salidas se cierran, es cuando sentimos el verdadero horror de estar vivos, y eso se ejemplifica perfectamente en The Road (John Hillcoat, 2009).

The Walking Dead (Frank Darabont, 2010)

PERSONAJES

El desarrollo de los personajes es de los aspectos más ricos dentro del género, pues el hecho de llevar a una persona a sus límites físicos y psicológicos hace que la veamos tal cual es, sin apariencias y en su estado más primitivo. La tensión que sufren a lo largo de la historia nos deja ver parte de la naturaleza humana, pues muchas personas que creemos fuertes y correctas en situaciones normales, resultan no serlo cuando las cosas se ponen difíciles y más cuando su vida depende de ello, o por el contrario, la gente que parece débil resulta adaptarse a la situación y logra sobrevivir; justamente es la adaptación la clave de la supervivencia.

La actitud de los personajes ha servido para hacer crítica social, pues nos muestran que cuando nuestra vida depende de ello la confianza es algo que se puede perder fácilmente. De la misma forma, la moral y las leyes sociales quedarán rebasadas cuando la ley de la selva sea la única forma de seguir vivo. En el Survival-Horror literalmente es comer o ser comido. En Carriers vemos como resulta imposible confiar en alguien sin importar su inocencia o lo inofensivas que luzcan las personas.

En éste género se explotan las características más obvias de los seres humanos: su mortalidad y susceptibilidad al daño. El SH apela a nuestro miedo a ser lastimados y lo potencializa colocándonos en situaciones sin salida. Por esta razón no tenemos héroes como personajes, la mayoría ve por sí mismo o por un pequeño grupo de personas, sin importarles que para salvarlos tengan que lastimar a gente inocente que únicamente busca sobrevivir al igual que ellos.

Carriers (Àlex Pastor y David Pastor, 2009)

ZOMBIS Y MÁS ZOMBIS

El SH es siempre asociado al género de Zombis (que no estoy seguro si en realidad es un género) debido que en los últimos años ha habido una gran producción de películas de éste tipo, en parte por los problemas sociales que ha sufrido la humanidad y por el gran horror que se le tiene a estas criaturas, que podemos explicar con la teoría del Valle Inexplicable (o Valle Inquietante).

Desde los zombis de George A. Romero a los engendros de Robert Rodríguez, la evolución y dinámica de las películas ha cambiado, al igual que el diseño de los muertos vivientes. Con cada entrega los muertos se hacen más voraces, inteligentes y peligrosos, y los argumentos han dejado de enfocarse en la dinámica de correr y disparar —que heredaran de los videojuegos— para centrarse en la crítica social. De aquellos primeros filmes Serie B a las grandes producciones de los últimos años, los zombis han evolucionado en todos los aspectos, generando incluso una variación dentro de su propio género, el Cine de Infectados (aquellos que no están propiamente muertos). Sin embargo, el Survival-Horror no se limita a muertos buscando carne fresca, pues el Horror va más allá de la vida o la muerte.

Para terminar, debe quedarnos claro que toda película de Zombis es SH pero no todo SH es de Zombis. Aunque he visto películas sobre Zombis tan inverosímiles que incluso dentro de la Serie B parecen absurdas y me hacen cuestionarme sobre si quizás dentro del infinito universo del celuloide exista un filme de muertos vivientes que no sea SH.

Planet Terror (Robert Rodríguez, 2007)