Midori

Título Original: 少女椿 (Midori).
Género(s): Eroguro, Horror.
Director: Hiroshi Harada.
Estudio: Kiryûkan.
Emisión: 1992.
Duración: 50 minutos.
Extras:

Midori: La Niña de las Camelias o Mr. Arashi´s Amazing Freak Show es una extremadamente perturbarte animación basada en el manga del maestro del Eroguru (erotique, grotesque, nonsense) Suehiro Maruo, titulado Chika Gentou Gekika Shôjo Tsubaki. Se trata de una obra de culto de la que sólo se habla en los pasillos más bajos dentro del circuito del Gore y el Hentai, y a la que sólo los más conocedores o perturbados espectadores son capaces de apreciar.

Midori no es una obra para todos, se requiere tener de algunas horas recorridas dentro del universo gore y una mente abierta capaz de descifrar la extraña historia que envuelve a esta obra, así como de un estomago que no sea sensible. Sin embargo, si son amantes de este tipo de géneros ésta es una película que no se pueden perder, ya que es una de las pocas dentro del anime que desarrolla el Eroguro puro, sin desvirtuase por la parte gore ni por el contenido sexual.

La calidad técnica deja mucho que desear; la animación es mala y la música es regular (auditiva o acústicamente hablando, porque en cuanto a emotividad y ambientación está perfecta). Aunque esto se debe a la falta de patrocinio para su producción. El diseño de personajes se apega mucho al estilo de Maruo y desentona drásticamente con el estilo que empezaba a consolidarse en los primeros años de la década de 1990. Los escenarios son raros, extraños e incluso incómodos, al igual que los personajes, algunos llegando a ser verdaderamente repugnantes. El único inconveniente es que muchas de las escenas son dibujos estáticos e incorporan muy pocos elementos animados, lo cual degrada la calidad y hace que todo parezca una simple transición de imágenes con sonido.

La historia gira en torno a Midori, una niña que vende flores a fin de conseguir dinero para poder ayudar a su madre, quien sufre una enfermedad desconocida. Desafortunada y repentinamente su madre muere y Midori queda sola. Para su desgracia, es engañada por un hipnotista para unirse a un circo de fenómenos, en donde será humillada, violada y degradada por parte de los perversos y desagradables sujetos que integran aquel perturbante circo. Para su fortuna, un enano que hace magia al estilo occidental llega al circo y se queda prendado de ella, protegiéndola y mimándola a partir de ese momento. Sin embargo, no todo es lo que parece y Midori termina aferrándose a un amor enfermizo que se mantiene debido a que es la única forma de salvación que ella encontró para poder sobrevivir a aquel violento mundo.

Lo que la obra nos refleja es que incluso dentro del más hostil de los ambientes, llenos de perversiones, amoralidad, crueldad y deformidad, es posible que algunas cosas se mantengan puras, como nuestra protagonista, quien inclusive en esas tortuosas condiciones pudo conocer el amor, pero también el miedo a lo que podría sufrir por el simple hecho de estar viva.

La crudeza de las escenas es simplemente impactante, pues no se trata de un gore estilizado y tierno (hasta donde cabe) como en Elfen Lied, ni de un gore visceral y rudo como en Gantz. Todo lo contrario, estamos frente a una obra que busca generarnos incomodidad, tristeza y desesperación, pero no a partir de la violencia misma, sino a partir de la crudeza con la que expone lo más bajo del ser humano. La obra incluso hace uso de un lenguaje poético intrincado y difícil de descifrar (nonsense) pero cuyo propósito es ser artístico, aunque en realidad termina siendo extraño.

Lo más interesante de la obra es cuestionarnos por qué asistir a un circo tan desagradable. La respuesta nos la da el mensaje central del filme: existe una vida tan cruel y horrible que nosotros, desde nuestros cómodos hogares, nunca querríamos experimentar, pero que por alguna razón nos produce un extraño y morboso placer observarlo desde la seguridad de nuestros asientos.

En conclusión, Midori es una obra para reflexionar y no dejarse impactar por el morbo, la violencia ni la sangre, estos son únicamente los vehículos mediante los cuales Maruo envía su mensaje. Aunque debemos tomar este filme con pinzas, pues es grotesco hasta el punto de incomodar al más aventurado auditorio, pero a pesar de ello no deja de ser una interesante propuesta audiovisual que engloba lo más podrido y perverso del ser humano.

Devil May Cry

Título Original: デビル メイ クライ (Debiru Mei Kurai).
Género(s): Aventura, Comedia, Drama, Horror, Sobrenatural.
Director: Shin Itagaki.
Estudio: Madhouse.
Emisión: 14 de junio de 2007 – 6 de septiembre de 2007.
Duración: 12 Episodios.

Hace 2000 años hubo una cruenta guerra entre el mundo de los humanos y los demonios, guerra que los humanos hubiesen perdido de no ser por Sparda, un demonio que se apiadó de la raza humana, se puso de su parte y derrotó a los demonios encerrando al príncipe demonio que había provocado la guerra en lo más profundo de una cripta. Tras esto, Sparda convivió con los humanos y se casó con una mujer llamada Eva con la que tuvo dos hijos mitad humanos, mitad demonios.

Para evitar que el portal hacia el mundo infernal se abriese nuevamente, Sparda confinó el poder de su hechizo en dos amuletos quienes fueron entregados a sus hijos. Dante, el menor, aprovechando las habilidades demoníacas que heredó, intentó vivir una vida como caza-recompensas de fenómenos paranormales, pretendiendo ignorar su pasado demoníaco, mientras que Vergil se empecinó en aumentar sus conocimientos sobre el mundo infernal, su padre y el infinito poder que los demonios pueden llegar a poseer.

Dante, el protagonista de la saga, logró detener las ansias de poder de su hermano, sellando una vez más la entrada entre los dos mundos. En el transcurso de esta travesía, logra despertar por completo su sangre demoníaca heredada de su padre obteniendo así poder superior. Finalmente decide dedicarse a la caza de demonios y demás seres sobrenaturales en su propia agencia la cual llamó Devil May Cry.

Con esta premisa, plasmada de forma magistral en las cuatro entregas de la saga de videojuegos desarrollada por Capcom, la cual nos tiene a acostumbrados a incontables combates a gran velocidad contra bestias infernales y otros esperpentos, utilizando todo tipo de armas; no podríamos esperar menos de la adaptación al anime. Sin embargo, el resultado final nos dejará con la sensación de que algo falta.

Esta miniserie tiene lugar entre el primer Devil May Cry y Devil May Cry 4, y en cierto modo sigue la mecánica de misiones presente en los videojuegos. Nos presenta la vida cotidiana de Dante, o más precisamente «lo que hace Dante cuando no está salvando al mundo». Ese es uno de los mayores puntos negativos de este trabajo, el argumento es imperceptible, casi como si no existiera. Los capítulos son muy básicos, cada uno presenta una historia independiente en donde nuestro protagonista acepta un nuevo trabajo relacionado con lo paranormal, pero debido a la pasión que pone en lo que hace, termina siempre endeudado y volvemos al principio. Detrás de estas pequeñas historias, se desarrolla la verdadera trama de la serie, la cual sólo es perceptible en el primer y último episodio. Al final, la historia no aporta algo nuevo a lo que ya conoces si has jugado las diferentes entregas, además de una mirada un poco cómica a la vida despreocupada de Dante con su agencia de investigación.

Los personajes principales conservan sus personalidades originales. Dante cumple su papel sin contratiempos: taciturno cuando le conviene, a veces arrogante e invencible durante las batallas, despreocupado y divertido, cuya mayor afición son las pizzas y el helado de fresa, aunque cabe destacar que en ocasiones se le ve poco enérgico. Para gusto de los fans, Trish y Lady también hacen su triunfal aparición, protagonizando algunas batallas muy bien logradas que aportan mucho a la serie. Por otro lado, los personajes secundarios hacen lo suyo, pero en ocasiones sentirás que están fuera de lugar.

Las escenas de pelea tienen lugar en los últimos momentos, y están dentro de lo que cabría esperar, pero es un poco extraña la simplicidad de los enemigos. Los demonios podrían haberse hecho mejor, un poco más detallados o con otras habilidades como los que aparecen en los juegos. Otro punto que algunos encontrarán negativo es que Dante pelea únicamente usando a Rebellion y Ebony & Ivory. No hay rastro de Devil Trigger ni de otras armas, características más que necesarias en los juegos de DMC.

La animación es muy buena, la calidad de dibujo es destacada, con excelentes diseños de personajes, en conjunto con unas voces que les hacen justicia. La música es pasable y está bien dentro del todo. Los fondos de escenario son oscuros y complementan bien la trama.

En conclusión, la serie tal vez no sea la viva imagen del videojuego original, pero contiene grandes momentos de acción. Espadas, pistolas y batallas demoníacas es lo que ofrece. Muy recomendable para aquellos que jugaron la saga y para quienes buscan una historia simple de cazademonios para pasar el rato. Si buscas una historia profunda y miles de personajes detallados, no lo encontrarás aquí.

Dead Space: Perdición

Título Original: Dead Space: Downfall.
Género(s):
Ciencia Ficción, Terror, Horror, Suspenso, Acción, Survival-Horror, Gore.
Director:
Chuck Patton.
Distribuidor:
Electronic Arts.
Emisión:
Octubre de 2008.
Duración:
75 minutos.

Dead Space es una de las sagas más recientes de videojuegos. Esta serie rescata varios elementos característicos del Survival-Horror, género abandonado durante esta generación de videoconsolas enfocado en la resolución de acertijos y evasión de enemigos,  y lo mezcla de forma refinada con disparos en tercera persona.

Para muchos de nosotros, la industria de los videojuegos de terror hace mucho perdió su objetivo, lanzando año tras año juegos basados en disparar como loco a todo lo que veas. Dead Space nos dio un respiro y presenta una aventura completamente nueva, una especie de Resident Evil en el espacio. En el juego original, tomas el papel de un ingeniero que supuestamente iría a reparar una nave espacial en problemas, terminando sumergido en una pesadilla de extraterrestres asesinos y cadáveres reanimados.

Si bien muchos critican que sus personajes son de lo más estereotipados, que el protagonista no piensa, sólo obedece y que el argumento no es lo más impresionante de universo, lo cierto es que se ha convertido en una franquicia estupenda, que puede sacarte un par de sustos genuinos como los de antaño, compuesta de varios juegos, cómics y el tema del día de hoy, una precuela a forma de cinta animada.

Downfall

Mientras realizan una profunda excavación en el remoto y deshabitado planeta Aegis 7, la tripulación del USG Ishimura encuentra una antigua reliquia religiosa llamada The Marker (La Efigie) considerada por una religión futurista como prueba de la existencia de Dios. La reliquia es desenterrada y llevada a bordo de la nave, donde es adorada por unos y despreciada por otros.

El profano artefacto provoca paranoia, suicidios e incluso asesinatos entre la tripulación. Pero el peor de los horrores todavía no ha surgido a la oscuridad. Retirar la Efigie de su lugar de descanso ha provocado el resurgimiento de una poderosa raza alienígena con la grotesca capacidad de reanimar los cadáveres humanos, convirtiéndolos en salvajes bestias asesinas conocidas como Los Necromorfos.

Ahora los sobrevivientes deben encontrar la manera de escapar, usando todos los medios posibles, resistiendo la locura que se apodera de ellos y en el peor de los casos, al menos contener la amenaza.

Cabe destacar que la animación de la película es muy buena, con personajes sencillos sin texturas complicadas. Dead Space: Perdición muestra una mezcla entre ciencia ficción y terror. Encontrarás referencias y pequeñas coincidencias con otras peliculas icónicas del terror espacial. Una de las referencias más importantes la podemos encontrar en 2001: Odisea en el Espacio por lo del monolito maléfico, y la saga comenzada por Ridley Scoot: Alien, donde el ambiente asfixiante y la sensación de que criaturas inimaginables acechan en las sombras han sido tomados en cuenta.

Las escenas poseen mucha acción, varias batallas y escenas gore a más no poder. La animación le viene muy bien a este aspecto, ya que utilizando otro estilo más detallado, dichas escenas pasarían a ser demasiado descriptivas; en cambio, la animación permite llevar este aspecto de un modo más «agradable» a la vista. Los efectos sonoros acompañan a la imagen de forma excelente.


Downfall presenta una historia con unas extraordinarias ilustraciones, grandes dosis de suspenso, sangre, descuartizados, Necromorphs y alguno que otro sustillo que cumple el objetivo de entretener. Su estilo sigue muy bien la dirección de los dos primeros juegos de la saga.

Muy recomendable para aquellos que gustan del gore o que han terminado alguno de los videojuegos, sobre todo porque encontrarás un par de criaturas conocidas. También sirve como una excelente introducción si no has probado el primer Dead Space en tu consola. Un paso más que acerca al cine con los videojuegos, por fin de manera correcta.