La delgada línea amarilla

Título Original: La delgada línea amarilla.
Género(s): Movie Road, Drama.
Director: Celso R. García.
Emisión: 2015.
Duración: 95 minutos.
Extras:

Generalmente las Movie Road son esas películas en las que toda la historia toma lugar cuando los protagonistas viajan por la carretera y aunque generalmente mucha de la acción trascurre dentro de un auto, también puede ocurrir sobre el asfalto. La delgada línea amarilla es una bellísima historia en la que cinco hombres conocerán las desdichas de uno de los trabajos más pesados que existen, pintar las líneas guía de las carreteras.

La película es muy buena, tanto en la historia, como en la música y obviamente en el apartado visual, sin olvidar el diseño de personajes y la calidad de actuación. Personalmente lo que más me gustó de los elementos técnicos fue la banda sonora, ya que es triste pero al mismo tiempo esperanzadora y me recordó mucho las melodías de Little Miss Sunshine, que es mi película favorita y curiosamente también es una Movie Road. Cabe destacar que la película es la opera prima de su director y que el perro que sale allí fue rescatado de la calle.

La calidad actoral no tiene mayor desperdicio, teniendo a grandes actores como Damián Alcázar, Joaquín Cosio y Fernando Becerril es obvio que podíamos esperar algo de calidad. El grupo de actores que siempre acompañan a Damián se conocen de sobra y tienen una espectacular química en pantalla, Silverio Palacios, Gustavo Sánchez Parra y el joven Américo Hollander lo hacen muy bien.

La historia gira en torno a don Toño, un hombre ya mayor aunque aún no anciano que trabaja en un deshuesadero. El hombre tiene lo mínimo para vivir, sus únicas posesiones valiosas son una caja con fotografías de su familia y una vieja camioneta. Para su mala fortuna el negocio no anda bien y es despedido. Para tratar de ganarse la vida acepta un trabajo en una gasolinera, en donde se reencuentra con un ingeniero con quien trabajó hace años. El ingeniero le ofrece el trabajo de pintar la línea de una carretera de 217 km y ante la falta de pago en la gasolinera Toño decide aceptar.

Don Toño inicia su nuevo trabajo, una larga y pesada jornada en la que lo acompañarán cuatro peones. Atayde, un simpático y gordinflón hombrecillo que trabajaba en un circo, Gabriel, ex chofer de camión, Mario, tipo de pocas palabras que no inspira confianza y Pablo, un joven despreocupado pero compadecido por lo demás, juntos iniciarán una travesía en la que vivirán de todo, desde las agotadoras jornadas de trabajo, las peleas entre compañeros, la traición, los peligros del camino y el agotador sol del desierto.

Desde un principio tenían muchas expectativas del filme, no sabía nada sobre él pero la portada y el hecho de que Damián fuera el protagonista eran garantía de que podría esperar algo bueno y también la breve sinopsis en la que se hacía referencia a las dificultades de la vida. Una película sobre trabajadores de carretera adentrándose en la vida rural del México real me atrapó al instante. Sin olvidar las breves alusiones a la ingeniería, la construcción y el trabajo de campo al que he estado expuesto gracias a mi familia.

El filme bien podría ser comparado con una historia de fantasía épica, pues a pesar de que aquí no hay magia, sí tenemos un viaje en donde los personajes enfrentarán una serie de obstáculos que terminarán por cambiar su vida, haciéndoles valorar las cosas de otro modo, algo que sólo pueden experimentar las personas que han trabajado en el campo fuera de una oficina.

Las peripecias del trabajo son sin duda la parte medular de la historia y la forma en que éstas impactan no sólo en nuestra vida, sino en la convivencia diaria con los colegas. A pesar de las rencillas, el paso de los días, los kilómetros caminados y el cansancio sólo se volverán menos pesados cuando los hombres empiecen a confiar en sus compañeros, contándoles parte de su pasado, sueños y aspiraciones frustradas que eventualmente los llevaron a trabajar en los caminos y eso es sin duda la parte más rica de toda la película, ver cómo, a pesar de todo, la camaradería es lo más importante para poder seguir adelante.

La incompetencia e irresponsabilidad de las personas a tu cargo, los desperfectos mecánicos, los robos, el sol, las extenuantes caminatas, las acampadas al lado de la carretera, la sed y la falta de comida son el precio que se debe pagar por realizar este tipo de trabajo y la ganancia no sólo es el dinero, sino los hermosos amaneceres, las noches estrelladas, la hermandad y las enseñanzas de don Toño quien, a pesar de todo, intenta enseñarnos un trabajo que posiblemente nadie más desearía hacer. Sin embargo, esas ganancias que alimentan el espíritu simplemente nos permiten apreciar mejor un plato de comida o nos reconfortan para seguir adelante, al final, lo que importa es sacar el trabajo a tiempo, cobrar y seguir buscando, como todas las personas en la dura realidad de la economía mexicana.

La película es una preciosidad, directo a mi top de películas mexicanas favoritas y el final es a la vez crudo, dramático y liberador. Concluir la jornada a pesar de todas las perdidas y el sufrimiento termina por valer la pena, pues a pesar de los malos momentos, aquellos breves instantes de alegría con los compañeros, de rizas y juegos se quedarán igualmente en nuestra memoria. La escena de la feria fue mi parte favorita y una con la que me pude relacionar directamente. Una película sumamente hermosa que superó por mucho mis expectativas. Por cierto, ver a Joaquín Cosio en un papel donde no es un maleante me agradó mucho.

Top Favoritos (Película y Serie)

Ya he publicado cinco tops sobre cosas favoritas: animes, openings, podcast, directores de anime y películas mexicanas, pero hoy toca hablar de mis favoritos de todos los tiempos en las dos categorías más importantes que se relacionan con el blog, mi película y mi serie favoritas. Aquí hablamos de anime, ciencia ficción y cosas por el estilo, pero eso no quiere decir que mis obras audiovisuales favoritas sean japonesas o pertenezcan a ese género. Así que quizás a algunos les sorprenda cuando les diga cuál es mi película favorita de todos los tiempos.

Mi serie favorita

Ya había hablado de ella e incluso tenemos una reseña desde hace varios años. Downtown, serie emitida por MTV a finales de los 90, es mi serie favorita tomando en cuenta tanto obras animadas como de acción real. Es una serie que puedo ver en cualquier momento y disfrutar siempre, pero en cada ocasión, con forme envejezco, he podido darle diferentes lecturas, aunque todas dentro del mismo ámbito un tanto friki en el que vive el protagonista.

Alex Hensen es un joven de 24 años muy inteligente pero poco motivado para aprovechar sus habilidades y lograr algo mejor que su empleo en un centro de fotocopiado. Además, le cuesta trabajo hablarle a la chica que le gusta y prefiere pasar el tiempo con sus amigos frikis jugando Calabozos y Dragones o recorriendo convenciones de Ciencia Ficción en busca de la última figura para su colección. En ciertos aspectos me identifiqué mucho con este personaje, pero esa no fue la única razón por la que me encantó la serie, sino por esa construcción urbana tan underground de Nueva York.

El hecho de que se cancelara antes de su último episodio y sólo cuente con una temporada la hace más mítica y de culto (en su tiempo yo la conseguí en Ares, ahora ya está en YouTube), sin olvidar que no da lugar a especulaciones y todo lo que sabemos de la serie es lo que hay dentro de los trece episodios que la integran. De alguna forma me encantan las series con finales totales en los que ya no hay posibilidades de más, pues eso te permite lograr comprender la totalidad de la obra sin preocuparte de que eventualmente habrá más contenido. Considero que Downtown es una de las mejores series jamás hechas pero que nunca recibió el reconocimiento que merecía.

Como muchos sabrán, Evangelion es mi serie de anime favorita, pero Downtown es mi serie favorita aún por sobre cualquier otra serie de mi infancia, como Malcolm el de en medio (para mencionar una de imagen real) o Hey Arnold! (para mencionar mi caricatura preferida de la infancia). Y si bien no he visto Downtown tantas veces como otras series, es una obra que me sigue fascinando por su simpleza, su naturalidad, su realismo, la construcción de sus personajes, los escenarios citadinos y esa parte friki en el protagonista con la que me he llegado a identificar.

Mi película favorita

Probablemente se sorprenderán cuando lean que mi película favorita no es una obra de animación japonesa, ni siquiera una obra animada, y mucho menos una obra Cyberpunk o de Ciencia Ficción. No, mi película favorita de todos los tiempos es una Movie Road, Slice of Life de comedia familiar con algo de drama, Little Miss Sunshine (2006).

Así es, Pequeña Señorita Sunshine es mi película favorita por sobre cualquier otra y por mucho. El por qué no lo tengo muy claro, pero quizás se deba a esa patética familia disfuncional de perdedores, la naturaleza de su interacción, los problemas que enfrentan, la tragedia y el tono cómico que está presente en todo momento. Sin olvidar el soundtrack que es maravilloso y su leve relación con Malcolm el de en medio y Breaking Bad (Bryan Cranston actúa en las tres obras y algunos eventos tienen lugar en Albuquerque donde trascurre Breaking Bad, que de hecho recién había iniciado grabaciones por lo que no es casualidad que dos de sus personajes aparezcan en el filme cuando la familia pasan por Colorado). Además de que Steve Carrell, mi actor de comedia favorito y protagónico de mi serie de acción real favorita (The Office US) actúa allí; es curioso que mi serie de acción real favorita tampoco sea de Ciencia Ficción, sino un Mockumentary (Falso Documental).

La primera vez que vi Little Miss Sunshine fue en la preparatoria en la clase de Sociología. La profesora había proyectado la película y nos había dejado de tarea entregar un reporte donde indicáramos los roles familiares, la personalidad de cada personajes y la crítica social a los concursos de belleza. Desde ese momento me fascinó la película, sobre todo por la familia misma y el personaje de Dwayne, que era un completo apático de la vida, nunca socializaba y odiaba la escuela y a todo el mundo (un poco como yo en preparatoria).

En un principio me enfoque en la estructura disfuncional de la familia y la burla (o crítica) a los concursos de belleza infantiles, pero con el paso de los años y las incuantificables veces que la he visto desde entonces, pude observar más allá del aspecto disfuncional, más allá de la etapa adolescente de Dwayne y del mensaje de unión familiar, y pude apreciar su comedia, la relación que tiene con otras series que posteriormente me gustaron y la forma de contar la aventura (por simple que fuese) que cinco personas vivieron en una combi mientras viajaban a California. Little Miss Sunshine es la única película que siempre voy a tener ganas de ver, la he llegado a ver dos o tres días seguidos e incluso más de una vez el mismo día. Cada vez que la veo no es que entienda algo distinto, no es tan profunda, pero en cada ocasión me divierte y me la paso tan bien como la primera vez que la vi.