Hace diez años publiqué mi primera entrada en un blog. Bueno, a decir verdad fue mi primera entrada en un blog llamado “Piedra, Papel o Tijeras” y que tenía la intención de convertir en un blog de anime; antes ya había escrito algunas tonterías sobre cosas de la preparatoria que nada tenían que ver con la animación oriental. Esas entradas fueron borradas y sustituidas por la reseña de dos párrafos de la serie AIR, la serie de animación japonesa que había visto más recientemente.
El nombre de “Piedra, Papel o Tijeras” los copié de un blog español con el mismo nombre (sin la o) que actualmente ya no existe. Ese blog reseñaba de todo, anime, series, películas y lo hacía con un lenguaje simple y muy breve, a los más tres párrafos. Allí me enteré de OVAs que en su tiempo eran un tanto de culto, como Hoshizora Kiseki, Hoshi no Koe y Pale Cocoon. Chuz, autor del blog, fue quien me dio a conocer a Yasuhiro Yoshiura y Makoto Shinkai, actualmente dos de mis directores favoritos. Y mis reseñas empezaron con ese estilo ligero, simple e informal.

Pasado un tiempo (algunos meses, quizás un año) cambié el nombre a “Cafer’s Anime Lair”, en honor a una extinta página dedicada a Evangelion que de hecho nunca tuve la oportunidad de visitar (para saber más de este tema y de mi inmersión en el anime te recomiendo el Podcast Piloto). El tiempo pasó y poco antes de abandonar el servidor de Windows Live Space cambié el nombre al actual Café Anime Lair. En esos últimos meses en el viejo blog publiqué una reseña de Dragon Ball, la cual fue comentada magistralmente por Vossk al grado de que su comentario fue mejor que mi propia reseña, tanto que eso me animó a pedirle que escribiera una reseña de toda la saga para mí, y ahí fue donde uno de mis mejores amigos de la preparatoria se convirtió en un colaborador del blog. Con el paso del tiempo lo fui animando para que reseñara más cosas y eventualmente participara tanto en el Podcast como en los esporádicos videos que subimos a YouTube.
Pasaron algunos meses y el servició de Live Space desapareció, muchos blogueros nos mudamos a WordPress, algunos transfirieron todo su contenido de forma automática y otros más decidimos comenzar de cero. En agosto de 2010 se publicó una reseña más extensa, estructurada y profunda que las que solía publicar en la desaparecida plataforma, esa reseña fue la de La Princesa Mononoke. Con el salto a WordPress inició una nueva etapa de blogueo en la que ya no sólo se comentaba anime, sino todo tipo de animación, ciencia ficción o, como dice el slogan del podcast, cosas frikis de la cultura pop.
En diez años hemos visto pasar a varios seguidores, uno de los primeros fue un tal Dark Duelist quien nos siguió fielmente durante nuestra primera etapa. DD o Doble D como le apodábamos en secreto, una tal Gatomón y otros más que aún hoy Hotmail me recuerda sus cumpleaños fueron las primeras personas en comentar y las que me permitieron ver el tipo de comunidades que podían crearse en el ciberespacio. Al llegar a WordPress aparecieron otras personalidades como Ragnarok de Desde el Palacio Valhala, Mike de Habitación Otaku y Ernesto de Cerdo Venusiano, con quienes he tenido el gusto de colaborar, aunque el mayor reconocimiento sin duda es para Kino, uno de los más fieles seguidores. Desde aquí un enorme agradecimiento a todos.
Una década creando contenido para internet se dice fácil, pero no lo es. Al menos en tres ocasiones he querido abandonar el blog, pero me alegra mucho no haberlo hecho. Aunque por diversos motivos han habido temporadas en las que se ha quedado un poco abandonado. Y no sé si sea casualidad pero muchos otros blogueros, youtuberos y podcasters han estado cumpliendo la misma edad en sus redes.

Pero si bien nosotros nos mantenemos, muchos otros que no lo han lograron. Recuerdo que unos de los primeros blogs que seguí fue el de un tal Kurtis Duende, un tipo antisocial que le tiraba mierda a medio mundo, sobre todo al gobierno y a Televisa, en aquellos días mi yo de dieciséis años quedó bastante impresionado por su forma de escribir tan inteligente, según yo. Kurtis Duende fue hackeado y desapareció.
Cuando ya me empecé a meter al mundo del anime encontré dos blogs más, uno de ellos, a quien considero mi máximo gurú, y quien quizás sea el blog sobre Japón más visitado en español es Héctor García de Kira, un Geek en Japón. Su forma de bloguear y de darnos a conocer el país del sol naciente en una época en que los japantubers no existían, me fascino e inspiró a seguir y mejorar cada vez más mi blog. El otro blog nació un par de años antes también el Live Space y después dio el salto a bloguer, lamentablemente en 2012, luego de siete años, cesó sus actividades, me refiero a la que quizás fue la página de noticia sobre anime en español más importante de su tiempo La Ventana de Saori.
Muchos otros blogs han desaparecido o han sido descontinuados. Anicast “la primera radio de anime en México” y otros creadores de contenido friki de la vieja guardia han pasado a mejor vida; incluso blogs más jóvenes que este ya ha sido abandonado. Eso resulta irremediable, pero si de algo puedo sentirme orgulloso no es de la cantidad de visitas que tenemos, ni de la calidad del contenido, es por el hecho de haber sobrevivido una década en un mundo donde el promedio de vida de un blog es de tres años, luego de los cuales los administradores pierden el interés o el tiempo para continuarlos.
Nosotros al menos no nos vamos a ninguna parte. Mi interés y emoción por escribir contenido para mi blog nunca habían sido mayores, tanto que ya tenemos cubiertas las reseñas para los próximos seis meses. En estos diez años se han publicado 406 entradas, se han suscrito 94 personas, hemos tenido 136 mil visitantes y acumulado más de 416 mil visitas. Y tan vez no seamos el blog más popular del mundo, pero al menos sí somos uno de los más constantes. Gracias por darse el tiempo de leer esta entrada tan especial para mí y espero que puedan acompañarnos durante diez años más.