Películas que podría ver en cualquier momento

No sé si a ustedes les pase lo mismo, pero para mí existen tres clases de películas, mis películas favoritas, las películas que pongo como fondo cuando quiero ver algo y no prestarle atención y las películas que puedo ver siempre, sin importar el momento y que sé que me van a divertir y las voy a disfrutar. La diferencia con estas últimas y las primeras (mis favoritas) es que para ver algunas de mis películas favoritas necesito un mood especial, un ambiente propicio y las ganas de prestar la atención que esos filmes se merecen y aunque sean de mis favoritas indiscutibles no siempre quiero verlas o, mejor dicho, ni siempre puedo verlas y disfrutarlas sin importar el momento, la situación y el contexto del lugar donde las vea.

De las películas que voy a hablar hoy son de esas películas que puedo ver siempre, sin importar si es en el autobús, en televisión abierta con muchos comerciales, si ya está empezada o está por terminar o si justo la vi el día anterior, igual la voy a querer volver a ver, le voy a prestar atención y voy a disfrutar de la historia y los momentos de diversión que ofrece. También son las que suelo poner cuando quiero ver algo pero no me decido por algo nuevo ni algo complejo que ya haya visto. Ahora, si bien puedo verlas en cualquier momento, algunas de ellas no están entre mis favoritas ya que, aunque me entretienen, no las considero grandes películas. Otras por el contrario, igualmente figuran en la lista de favoritas indiscutibles.

EL DIABLO VISTE A LA MODA

Ya hablé de ella en la entrada anterior, pero esta es una de esas películas que puedo ver siempre, no importa dónde ni cómo, cada que la pasan en la tele la veo, sin importar que no sea desde el principio. No sé el número exacto de cuántas veces la he visto, pero estoy seguro de que al menos una vez al año la veo por decisión y otras cuantas veces más la veo cuando la encuentro por casualidad en la señal abierta de televisión.

TREMORS

Terror en el Desierto está entre mis películas favoritas de toda la vida y quizás sea mi película favorita de monstruos. Estoy seguro que durante el último lustro la he visto al menos tres veces por año, la tengo descargada digital en mi tableta y cuando no tengo internet ni televisión me pongo a verla. También la suelo usar de fondo, pero soy tan fan que no puedo resistirme a sólo escucharla mientras hago otra cosa e inevitablemente termina prestando atención.

LITTLE MISS SUNSHINE

También ya hablé de esta película la cual considero mi película favorita de toda la vida y creo que una de las cosas por la cual me gusta tanto es que si bien suelo necesitar ese ambiente especial para verla, por lo general la puedo ver también en cualquier momento. Aunque tampoco es que la vea tanto, con esta sí suelo buscar momentos más apropiados, pero en dado caso de que aparezca en televisión o esté frente a mí por alguna otra circunstancia claro que la voy a ver y le voy a prestar atención. Cosa que no me pasa con otras de mis películas favoritas, las cuales sí requieren ese mood específico para que quiera verlas y que si las encuentro por casualidad en televisión no las veo para no arruinar ese místico ambiente que me produce verlas en el momento correcto.

CRIATURAS DE LA NOCHE

Otra que está entre mis favoritas y la primera parte de la que considero es mi saga de Ciencia Ficción favorita (la saga de Riddick). Al igual que con Pequeña Señorita Sunshine suelo cuidar los momentos en que la veo, pero también si se me aparece en pantalla gustoso me voy a poner a verla sin dudar un segundo. No la suelo ver tanto como quisiera pero vaya que me gusta mucho.

SUPERBAD

Otra que tampoco suelo ver tanto pero que me encanta y que recientemente decidí que formaría parte de mis diez películas favoritas de toda la vida y que obviamente lidera el primer lugar en películas de comedia adolescente es Superbad. Ya hablaré de ella pronto, pero puedo decir que justo la acabo de ver hace tres días (para cuando escribo esto) y que la veré antes de que termine la próxima semana seguramente porque quiero escribir su reseña, cosa que no sé por qué no he hecho aún.

FURY ROAD

Junto a El Diablo Viste a la Moda y Tremors, es quizás una de las películas que más veces veo al año y es que esa escena de la persecución a Furiosa por parte de Inmortan Joe y su séquito de warrboys rumbo a la tormenta de arena es deliciosa. Una de las mejores y más estimulantes escenas de acción que jamás haya visto. Con seguridad también la veo una o dos veces al año y es de las pocas películas que he comprado en Blue Ray, además de que es una de las dos únicas películas que he visto más de una vez en el cine.

PACIFIC RIM

No estoy seguro de si esta y la anterior podrían entrar en mi lista de películas favoritas, pero sin duda el tributo que Del Toro le rinde Evangelion es una de las cintas que más disfruto ver, aunque esta sí me gusta verla desde el inicio, al igual que Fury Road, no obstante si me topo con cualquiera de ellas ya empezadas las veré hasta el final sin importante en dónde ni cuándo las vea. Esta es la otra película que he visto más de una vez en el cine.

EL NÚCLEO

Creo que esta es mi película comodín, cuando de plano no tengo nada que ver o no puedo decidirme elijo esta. Es también de las que más veo (sobre todo en años recientes) y si bien no es de mis películas favoritas y tampoco la considero una obra maestra logra entretenerme y puedo verla tanto como simple ruido de fondo como para prestarle atención a la trama, la cual ya me sé de memoria como en el resto de películas que he mencionado hoy, pero que aún con eso me gusta ver una y otra vez.

¿Y ustedes, qué películas pueden ver sin importar las circunstancias?

El Diablo Viste a la Moda

Título Original: The Devil Wears Prada.
Género(s): Drama, Comedia, Chick Flick, Slice of Life.
Director: David Frankel.
Emisión: 2006.
Duración: 109 minutos.
Extras:

No soy un fan del Chick Flick, la verdad es que no suelo consumirlo con regularidad, aunque conozco el género y sus características, no obstante, tengo que aceptar que una de mis películas favoritas es precisamente esta, película basada en la novela homónima de Laurence Weisberger. De hecho, El Diablo Viste a la Moda es una de esas películas que puedo ver siempre, donde sea, cuando sea, sin importar las circunstancias ni si la he visto recientemente, igual la voy a volver a ver y la voy a disfrutar con seguridad. Y eso hace que esta película figure dentro de mis favoritas de toda la vida.

No recuerdo cómo conocí esta película ni la primera vez que la vi, pero desde entonces estoy seguro que la he visto prácticamente al menos una vez al año. Y es que su calidad y temática es algo que la mantiene vigente a pesar de ser una película de 2006, se sigue viendo bien y es igual de entretenida. Además de que es uno de los mejores representantes de su género, tiene excelente música, buenas actuaciones y un ambiente urbano que me fascina.

La historia gira en torno a Andrea Sachs, una mujer joven recién egresada de la universidad donde estudio periodismo. Andy busca su primer trabajo y es canalizada a Runway, la revista sobre moda más famosa del medio, en donde tiene la oportunidad de trabajar como asistente de la jefa de redacción, la afamada e implacable Miranda Presley, quien termina por contratarla a pesar de su obvia falta de conocimiento sobre la moda.

Andy sufre durante meses en su nuevo trabajo, donde su jefa le asigna tareas casi imposibles y la regaña por cada error que comete, aunque todo tendrá su recompensa, pues si logra aguantar un año podrá viajar con ella a París y conocer a los más afamados redactores, lo cual le garantiza poder ingresar a trabajar en cualquier revista o periódico que ella desee. A fin de lograr su meta, Andrea pide ayuda a Nigel, jefe de arte en la revista quien a pesar de criticar su aspecto en un principio termina por establecer una buena relación con ella.

Con la ayuda, los consejos y sobre todo los atuendos que Nigel le da, Andy empieza a destacarse en su trabajo, hasta el punto en el que Miranda la reconoce como su mejor asistente y decide llevarla a ella y no a Emily (la primera asistente) a la semana de la moda en París. Andrea deberá decidir sí lo que realmente quiere es ser como Miranda, aún si eso significa traicionar a su compañera de trabajo y distanciarse de su novio y amigos.

Como buen Chick Flick tenemos a la mujer joven enfrentando el paso de la juventud a la vida adulta independiente y en este caso es el primer trabajo lo que la pondrá a prueba. Y a pesar de que este género se enfoca en una audiencia femenina, creo que todos podemos sentirnos  identificados con esa frustración que puedes llegar a sentir en tu primer empleo formal, al grado de detestarlo y querer renunciar. No obstante es parte de crecer y algo que nunca te dicen en la escuela, pero luego de un tiempo le agarramos la onda a la vida fuera de las aulas y logramos estabilizarnos y seguir con ese nuevo ritmo de vida.

La música como ya dije es excelente y le va perfecto al ambiente urbano que también me gusta mucho, algo debe tener Nueva York que logra convertirse en el escenario ideal para cierto tipo de historias y ésta en lo personal le va perfecto a la ciudad. Además de los escenarios y la banda sonora, el desarrollo de personajes es algo a destacar, pues todos crecen muy bien y su desarrollo es impecable, pero quien sin duda hace que la película sea grandiosa (y no exagero en decir que fue gracias a ella que tuviera tanto éxito) es Maryl Streep interpretando a Miranda. Su actuación como la malvada jefa es impresionante.

Y justamente Miranda es el personaje más complejo y aunque la protagonista es la joven Andy (Anne Hathaway) creo que la película bien podría ser sobre Miranda desde la mirada de Andrea. Ese tabú de “la dama dragón” que cargada Miranda es algo que debo mencionar, pues es frecuente que las mujeres en puestos de poder sean vistas como rudas, frías e implacables, pero pocas veces se menciona que esa forma de actuar es necesaria para que ellas puedan sobrevivir en un mundo liderado por hombres. Y eso es algo que he visto en la Arqueología, las mujeres en puestos importantes o al mando de trabajadores hombres desarrollan una personalidad mucho más ruda que los hombres en el mismo puesto debido a que deben hacerse respetar, cosa que es a causa del machismo de nuestra sociedad.

Otro aspecto relacionado a la figura de “mujer en el mando” es la de la incompatibilidad que aparentemente existe entre lograr el éxito profesional y mantener una vida personal y familiar estable. Miranda es vista como una mujer exitosa y la mejor en lo que hace, pero tiene serios problemas familiares a causa justamente de tener que otorgar tanto tiempo a su trabajo descuidando con ello sus relaciones familiares y sentimentales. Esto deja claro que a las mujeres se les exige mucho más en sociedad y también lo vemos en Andrea, ya que los problemas con su novio empiezan justo a causa del trabajo. No obstante, el papel que interpreta Maryl Streep y el propio desarrollo de su personaje es formidable.

Lo complejo que puede llegar a ser el mundo de la moda es otro tema a comentar, ya que si lo vemos desde afuera lo único que podemos percibir es la frivolidad de un ámbito donde sólo la estética y el físico importa, donde verse bien es lo único que interesa, pero al parecer hay mucho más en la moda que el simple aspecto estético. La toxicidad del novio es otra cosa de la que se ha hablado en redes últimamente y sería interesante de analizar al igual que ese empoderamiento feminista que se vislumbra, pero no lo haré aquí de momento.

La película es grandiosa, aborda aspectos sobre el empleo, la juventud, las relaciones personales, el éxito profesional y lo sacrificios que puede implicar, tiene un mensaje y personajes para los jóvenes pero también para la gente mayor. Sin lugar a dudas es una película extremadamente bien hecha y que a mí se me suele antojar ver en las fechas cercanas a navidad.

La película me encanta por el fashionismo que me es totalmente ajeno, lo cual lo convierte en algo diferente a lo que acostumbro consumir en el cine y por ende se vuelve exótico y atractivo para mí. Así que supongo que esa conjunción, aunada a una historia con la que los adultos jóvenes podemos identificarnos y un excelente desarrollo de personajes la han convertido en una de mis películas favoritas y al no ser súper compleja, sino algo común y tranquilo que podríamos catalogar como Slice of Life hace que la pueda ver y disfrutar en cualquier momento.