Título Original: Leon: The Professional.
Género(s): Drama.
Director: Luc Besson.
Emisión: 1994.
Duración: 110 minutos.
Extras: –
Tenía tiempo queriendo ver esta película y al fin me di la oportunidad, sobre todo por ver la primera aparición de Natalie Portman en cines, además de que las críticas que había escuchado eran muy buenas. Así que puedo decir que en efecto, El Perfecto Asesino o Léon, como también se le conoce, es un excelente drama de temática policiaca con fuertes escenas y grandiosas actuaciones.
La calidad general del filme es magnífica, ya se le nota la edad pero después de tantos años es obvio que eso iba a suceder, además de que al estar ambientada en ese viejo Nueva York de los noventa es imposible no percatarse del paso del tiempo, pero para mí eso le da un toque de nostalgia, pues la ciudad de Nueva York que a mí me tocó conocer por el cine y la televisión fue justamente la de esa década. La caracterización, los efectos al momentos de los balazos y la música se acoplan igualmente al resto de la trama y son muy buenos, sobre todo la banda sonora.
La historia sigue a Léon, un asesino profesional solitario que es el mejor en su trabajo. Léon vive en un departamento al lado de una familia cuyo padre se dedica al narcotráfico. Luego de hacer enfadar a sus jefes por perder parte del producto es asesinado como venganza junto a toda su familia, la única en salvarse el Mathilda, una pequeña niña de doce años que había ido a la tienda cuando llegaron los sicarios. Al ver a su familia masacrada Mathilda pasa de largo y toca en la puerta de Léon, quien la abre salvándole la vida.
Desde ese momento Mathilda vive con Léon, a pesar de que en un principio éste no está del todo seguro, pues la convivencia diaria con la niña va reblandeciendo su corazón. Mathilda le pide a Léon que le enseñe su oficio, pues quiere vengarse de quienes asesinaron a su familia, no porque quisiera mucho a sus padres, quienes de hecho la maltrataban, sino porque aquellos sicarios mataron también a su pequeño hermanito de cuatro años. Sin estar muy de acuerdo, Léon le enseña a la niña las principales de un asesino.
Debido al trabajo de Léon cambian constantemente de residencia, quedándose siempre en hoteles del área. Léon trabaja para un comerciante italiano quien percibe en Léon un cambio producto de su convivencia con la niña, con quien ha empezado a generar vínculos afectivos. Mathilda se topa por casualidad con los asesinos de su familia y descubre que el líder es un agente de la policía, así que usando los conocimientos que Léon le ha enseñado decide tomar venganza por su cuenta, pero la inexperiencia la hace fallar y ahora ella y Léon son perseguidos por toda la policía.
La película es muy buena, personalmente no sabía que esperar de ella a pesar de que conocía la premisa, pero lo que vi me gustó mucho. Esa extraña relación entre León y Mathilda tiene muchas vertientes, pues por un lado vemos como Léon era excelente en su trabajo porque estaba sólo sin nadie por quien preocuparse, por lo cual nunca fallaba ni le pasaba nada, pero cuando la niña llegó a su vida empezó a titubear y a cometer errores. Este aspecto me parece muy acertado, porque en efecto, cuando no tenemos a nadie por quien preocuparnos sólo nos cuidamos a nosotros mismos, pero el tener a alguien, como logra constatar el protagonista, le da mayor sentido a tu vida.
El otro aspecto es más controversial porque esa relación y amor que empieza a gestarse entre ambos nos remite mucho a la relación del adulto y la lolita. Mathilda dice estar enamorada de Léon porque, a pesar de ser un asesino, es bueno con ella, la cuida y la trata bien, algo que su propia familia nunca hizo. Y el propio Léon, aunque en un principio no lo acepta, parece también empezar a enamorarse de la niña. No obstante esa parte no pasa a más y todo queda en meras escenas muy poco sugestivas que ni siquiera están a nivel de la obra de Navokob. Pero sin duda es uno de los temas que trata el filme, ya que ver a una niña de doce años vivir con un hombre mayor que no es su familiar se puede prestar a mucha controversia.
La propia personalidad de la chica es otro aspecto a resaltar, pues al sufrir de abuso y violencia familiar tiene un visión muy cruda de la vida y eso le permite encajar a la perfección con Léon, además de que le da un aíre de madurez que la hace lucir mayor y eso es algo muy destacado si tomamos en cuenta que Natalie Portman estaba interpretando su papel debut. En el lado contrario tenemos a Léon, magníficamente interpretado por Jean Reno, quien logra otorgarle al personaje esa personalidad de tipo aislado al que le cuesta relacionarse con las demás personas, frio y vagabundo, sin un verdadero hogar y cuyo cambio es posible notarlo con forme avanzan los minutos y se va acercando más a Mathilda.
Otra actuación que quiero destacar es la de Gary Oldman, quien interpreta al oficial y jefe de la mafia, su papel es impresionante y le da ese toque de locura y genialidad que requiere el personaje. Además de que eso nos permite abordar un tema que es sumamente recurrente y no ha cambiado, ni creo que lo haga pronto, que es la relación entre las mafias y el poder judicial. Aquí los mafiosos chinos, italianos y seguramente de otros lugares estaban íntimamente relacionados con personas del gobierno y la policía en puestos altos, siendo, como siempre, los trabajadores de abajo quienes terminaban por sufrir la peor parte de la violencia de, como ahora le llamamos, el crimen organizado.
Una grandiosa película con buenas actuaciones, situaciones que quizás rallan en lo exagerado pero que nos regalan buenas escenas de acción, temática policía y drama crudo con esa constante posibilidad de relación entre el adulto y la lolita y, por supuesto, balazos, muchos balazos con un tipo que es el mejor para matar. Excelente recomendación y un clásico del cine de los años noventa que deberían darse la oportunidad de ver.