Lucy

Título Original: Lucy.
Género(s): Ciencia Ficción.
Director: Luc Besson.
Emisión: 2014.
Duración: 89 minutos.
Extras:

Cuando la película de Lucy se estrenó, recibió una buena publicidad, después de todo estaría protagonizada por la guapísima Scarlett Johansson y el multilaureado Morgan Freeman, además de que su director es bien conocido por sus obras de Ciencia Ficción. Aunque me enteré de ella no llamó mucho mi atención como para ir a verla, eso de que una persona libera el 100% de su capacidad cerebral (cosa que se supone no es cierta porque sí usamos todo nuestro cerebro) no me resultaba tan interesante como para ir al cine. No pasaba por mi mente de qué forma podrían darle ese poder a alguien ni tampoco lograba imaginar una forma interesante y fresca de abordar el tema.

Por asares del destino mientras cambiaba de canal como suelo hacerlo cuando veo televisión (cosa cada vez menos frecuente) llegué a una película donde salía Scarlett y le dejé allí, no sabía cuánto llevada desde que había iniciado pero no parecía ser mucho. De inmediato identifiqué que la película era Lucy y decidí que, a falta de otra cosa (sobre todo de Internet) era la mejor opción para ver esa noche. Y lo fue, afortunadamente la película resultó ser mucho mejor de lo que esperaba, con una trama interesante que logra meter intriga y acción constante.

La historia gira en torno a Lucy, una mujer joven que está de viaje en Taiwan, donde conoce a un chico en un bar, a la mañana siguiente el tipo le pide que entregue un maletín a un empresario coreano. Lucy se rehúsa pero se ve obligada a hacerlo, aunque las cosas salen mal y la mafia coreana la toma de rehén y la obligan a abrir el maletín pensado que puede ser una bomba contra el jefe de la mafia. Lucy lo abre y dentro hay cuatro paquetes de una nueva droga sintética llamada CPH4 que los narcotraficantes pretenden introducir en Europa. Para ello usan a Lucy y a otros tres ciudadanos europeos (un alemán, un francés y un italiano) para introducirles los paquetes en su abdomen y usarlos como mulas para contrabandear las droga a otros países.

Mientras está cautiva, Lucy es agredida por los sicarios que la vigilan y la bolsa de droga se rompe dentro de su abdomen. La droga se dispersa en su sistema y le da la capacidad para liberar todo el potencial de su cerebro. Lucy empieza a recordar cada momento de su vida, adquiere habilidades sobrehumanas, se vuelve capaz de controlar su metabolismo, modificar su cuerpo, controlar ondas de radio, internet y electricidad, así como a otras personas. Con sus nuevos poderes se vuelve consiente de todos los conocimientos del universo y también de hecho de que ese poder va a destruirla, así que antes de morir contacta a uno de los científicos más prominentes en neurociencia, en profesor Samuel Norman, creador de la teoría cerebral del 10%, ya que es el único que puede comprender por lo que Lucy está pasando.

El profesor le dice a Lucy que lo mejor que puede hacer es pasar sus conocimientos, así que hacen una cita para verse. Sin embargo, Lucy no tiene tiempo suficiente para llegar con el profesor, no sin una nueva dosis de aquella droga, así que contacta con un policía en Europa llamado Pierre del Río para que detenga a los tres hombres que trasportan la droga en sus cuerpos. La redada del capitán es un éxito y ahora tiene posesión de los paquetes, pero la mafia coreana toma cartas en el asunto para recuperar su producto y equipados con armas de alto poder van tras Lucy y Pierre para recuperar su droga antes de que ella use todo lo que queda para alcanzar el 100% de su poder.

La película es muy buen en término de acción, tanto la parte policial como la de los mafiosos coreanos es entretenida y personalmente considero que fue un gran acierto situar el inicio de la historia en Asia, pues de la un toque entre místico y exótico. La actuación de Scarlett es genial y los poderes y las menciones que se hacen sobre los conocimientos más recónditos del universo resultan interesante, así como la referencia a Lucy, el Australopithecus apharensis. El punto menos fuerte es eso del 10% de uso cerebral, que no logra convencerme, pero si permitimos ese elemento, el resto del filme es muy bueno, no una obra maestra pero sí una de esas películas que se pueden ver más de una vez cuando queremos pasar la tarde disfrutando de acción y una trama a la que hay que poner una pisca de atención pero que tampoco tanta.

En la parte técnica si debo decir que se destaca bastante, sobre todo en lo visual y la banda sonora. La música usada me gustó mucho y logra generar ese ambiente de conocimiento y misticismo. Y en lo que respecta a los escenarios y efectos especiales usados para denota el poder de Lucy también considero que son buenos, aunque sí hay algunos que se notan algo chafas o donde el CGI pudo haber sido más realista.

En conclusión, la película me pareció una buena opción para pasar la tarde, es palomera pero se puede disfrutar viéndola más de una vez. La intriga y la acción te mantienen enganchado, así como la sola presencia de Scarlett. Si no le prestan atención a la parte de ficción sobre lo del cerebro podrán disfrutar mucho el filme, que si bien nunca será una de las grandes obra de la Ciencia Ficción es una filme bastante decente para ver sin mayores pretensiones.