El Origen

Título Original: Inception.
Género(s): Ciencia Ficción, Drama.
Director: Christopher Nolan.
Emisión: 2010.
Duración: 148 minutos.
Extras:

Una de las películas que tenía pendiente ver desde hace mucho es El Origen, una de las obras de Ciencia Ficción que más revuelo causó entre los fans hace casi una década, creado toda una legión de seguidores y sobre todo de personas que trataron de desarrollar teorías explicativas sobre el multiverso de los sueños ganándose la reputación de ser una historia compleja y nada fácil de entender. Incluso series icónicas como Los Simpson parodiaron el filme.

Primero tenemos que destacar lo obvio, la parte técnica. Visualmente la película es maravillosa, tanto por los hermosos, pulcros y elegantes escenarios como por la vistosidad de sus efectos especiales. Creo que desde The Matrix (1999) no se había visto algo parecido en el manejo del espacio y los movimientos de cámara. Los efectos son sin duda uno de los atractivos principales, sobre todo esas cámaras lentas. Los escenarios también los debemos destacar pues eligieron lugares hermosos que son, al mismo tiempo, exóticos y laberínticos.

En cuanto a la música supongo que es igualmente buena, lo que pasa es que estaba tan absorto en la historia, los efectos y toda la parte visual que no fue sino hasta los créditos cuando me percaté de que no había puesto atención a la banda sonora, pero esta fue compuesta por Hans Zimmer por lo que es sinónimo de calidad.

Las actuaciones tienen un nivel formidable tan sólo porque tenemos a muchas estrellas ya consagradas. El protagónico a cargo de Leonardo DiCaprio es espectacular y el resto de su equipo es interpretado por actores igualmente buenos, entre los más famosos están Marion Cotillard a quien algunos ubicarán por La Vida en Rosa, Joseph Gordon-Levit mejor conocido por su papel en 500 Days of Summer, Ellen Page quien interpretara a Kitty en la saga de X-Men, Tom Hardy quien fue el nuevo Max Rockatansky en Fury Road, Ken Watanabe que participó en la más reciente saga de Godzilla, Cillian Murphy protagonista de 28 Day Later, Michael Cane mejor reconocido como Alfred en la saga The Dark Knight, quien fue dirigida por Christopher Nolan y por eso varios actores participaron en alguna otra de esas películas.

La historia gira en torno a Dom Cobb un extractor, persona dedicada a robar información de la mente de las personas mientras duermen. La tecnología que hace esto posible permite que varias persona compartan sueños y dentro de ellos pueda encontrar lo que buscan. Cobb y su compañero Arthur son reclutados por Saito, un poderoso empresario, para implantar una idea en una persona, un trabajo opuesto al de extraer denominado Origen. Saito quiere que Cobb implante de idea de destruir el imperio de su padre en Robert Fisher, heredero de la corporación rival de Saito. La dificultad que implantar una idea implica hace titubear a Cobb, pero Saito le promete resolver sus problemas legales si lo logra, deseoso de poder regresar a su país y ver a sus hijos Cobb acepta.

Cobb y Arthur inician la búsqueda de su equipo, pues para lograr implantar la idea deben ir muy profundo en el subconsciente y para ello tendrán que construir tres niveles de sueño, esto es, un sueño dentro de un sueño dentro de un sueño. Lo primero que necesitan es un arquitecto, alguien que construya los escenarios a manera de laberinto, allí en donde entra Ariadne, una estudiante de la universidad, ella diseña cada uno de los niveles del sueño. Para obtener información necesitará a un falsificador que se haga pasar por otras personas, ese será el trabajo de Eames, sin olvidar a un químico que los mantenga dormidos y estables mientras dura la misión, esa será la tarea de Yusuf.

Con el equipo completo la tarea ahora es diseñar la misión y la manera de implantar la idea, la cual debe ser muy sutil para que germine y crezca como propia dentro del individuo, para ello necesitan implanta una parte de dicha idea en cada uno de los tres niveles. Además de implantar la idea de manera sutil, deberán ser cuidadosos son las proyecciones, personas proyectadas por la víctima, en esta caso Fisher, y que pueden percibir cuando están en un sueño y atacar al soñador, para mala fortuna del equipo la mente de Fisher ha sido entrenada para elaborar defensas y evitar que le roben información mientras duerme.

El tiempo trascurre distinto en los sueños, mientras más profundo van, más rápido pasa el tiempo, en el primer nivel 5 minutos son una hora, su misión será de 10 horas en la realidad, lo que equivale a una semana en el primer nivel, seis meses en el segundo y diez años en el tercero. Estando tan profundo en el sueño, no podrán despertar fácilmente, así que diseñan un sistema basado en la sensación de desequilibrio. Generalmente cuando alguien muere en un sueño despierta, pero a esa profundidad su mente no despertará, sino que vagara en un limbo eternamente. El equipo tendrá que trabajar con rapidez para implantar la idea y evitar que las defensas de Fisher los maten o no podrán despertar.

La construcción metafórica de los sueños es maravillosa, el meter un sueño dentro de un sueño e incluso más, es una idea fabulosa, pero la manera en que se aborda el concepto de realidad lo es aún más y el uso de los tótem para distinguir un mundo de otro es un buen toque que le aporta cierto misterio al final. Para aquellos que pasaron mucho tiempo soñando, la realidad dejo de serlo y ahora sólo pueden vivir en sus sueños pues todo lo demás lo conciben como ilusorio. Anteriormente pensaba que la historia estaba muy basada e inspirada en Paprika, obra de Yasutaka Tsutsui y que fuera adaptada al anime por Satoshi Kon, pero la forma de hablar de lo que es real y lo que no me recordó más a The Matrix, pues a pesar de hablar de varios niveles de realidad no considero que llegue a pertenecer al género del hiperrealismo.

En el mundo que crea el filme compartir sueños parece ser algo común pero ilegal y si no ilegal al menos se hace de forma clandestina, quienes roban información en sueño lo hacen de manera detectivesca y eso le da un toque que nos remite a las películas del Film Noir, un poco al estilo del clásico Thriller policiaco sin realmente serlo, pero eso permite mucha acción en pantalla y enfrentamientos entre hombres armados realmente emocionantes.

El jugar a no saber qué es real y qué es un sueño es algo que engancha al espectador, pero no es tan difícil de entender realmente. Cuando la película se estrenó vi muchas reseñas y comentarios sobre lo compleja que era y lo difícil de entender o distinguir entre los sueños y la realidad, pero de hecho es bastante simple de entender y como nos van guiando nivel por nivel siempre sabemos qué tan profundo estamos en el sueño. He visto animes de temática psicológica mucho más complejos que esta película, aunque el final abierto sí te deja con la duda de qué fue real y qué no, pero sólo en cuestión del desenlace.

Es un final muy inteligente, de hecho toda la película está construida de forma muy inteligente para atrapar la atención del espectador, el dejar ese final abierto es justamente lo que enganchó a muchos fans y les obligó a crear sus propias conclusiones y teorías. Dicho final me recuerda mucho al de Blade Runner (1987) donde nos quedó la duda de si Deckard era un replicante o no, aquí nos queda la duda de si Cobb logró despertar o no. Hay tanta acción en la película que a pesar de su larga duración el tiempo se pasa muy rápido. Hay emoción, acción, peleas, armas y un trasfondo complejo pero no imposible de entender. Sin duda una película obligada para todo el amante del buen cine.

Súper

Título Original: Super.
Género(s): Comedia.
Director: James Gunn.
Emisión: 2010.
Duración: 96 minutos.
Extras:

Las películas de superhéroes ha seguido tres caminos principalmente: las grandes producciones aptas para toda la familia (The Avengers), las grandes producciones para el público adulto (Watchmen) y aquellas que critican, al tiempo que reinventan, esa figura del superhombre a partir de gente común y corriente (Kick-Ass). Este filme es del último tipo, pero además es de esas historias donde el protagónico lo tiene un personaje que es un total perdedor, fracasado y débil, como en Superbad (2007) o Napoleon Dynamite (2004). Kick-Ass (2010) es reconocida como una versión ácida del superhéroe sin poderes, pero Super se estrenó primero.

La calidad es muy buena aunque en un principio no lo parezca, cuenta con una buena banda sonora y una tomas con cámara al hombro que la hace ver algo simple y de baja calidad (de momento parece como si fuera un documental), pero luego de un tiempo uno se acostumbra. Lo más destacado son las personalidades que actúan en el filme, pues tenemos en el papel protagónico a Rainn Willson, mejor conocido por su magistral interpretación de Dwight Schrute en The Office US (mi serie no animada favorita), Kevin Bacon como al malo, a quien recordamos de Tremors, Ellen Page en un papel muy loco y Liv Tyler como la damisela en peligro. A primera vista parece una película de baja calidad e incluso un Mockbuster, pero resulta ser más que lo que uno esperaría.

La historia sigue a Frank Darbo, un cocinero y completo perdedor cuya vida entera no ha sido más que sufrimiento, lo único que le reconforta el su esposa Sara, a quien ama profundamente a pesar de que es una adicta en recuperación. Sin previo aviso, un narcotraficante conocido como Jacques enamora a su esposa y ésta lo abandona. Frank trata de recuperarla sin éxito al punto de querer darse por vencido, hasta que una hierofanía le revela su misión en el mundo, si no existen superhéroes en la vida real por qué no convertirse en uno. Dios en persona toca con su dedo a Frank y este recibe el don divino para convertirse en un luchador de la justicia, aunque todo fue una alucinación provocada por ver un programa religioso donde Holy Avenger lucha contra el diablo.

Convencido de ser el elegido de Dios, Frank inicia su investigación sobre todos aquellos superhéroes sin poderes, para ello recurre a una tienda de cómics donde conoce a Libby, una jovencita apasionada por los enmascarados justicieros. Luego de investigar un poco concluye que además de una identidad secreta necesita un arma personal, nace así El Rayo Colorado (The Crimson Bolt), un héroe que lucha contra el mal ataviado en un traje rojo y armado con una llave Stillson. Frank inicia su lucha contra el crimen, sin embargo, sus acciones son más criminales que heroicas, pues su llave hiere de gravedad a los malhechores, algunos de los cuales no hicieron más que saltarse la fila del cine.

Debido a lo agresivo de sus ataques El Rayo Colorado es considerado un psicópata y se le tacha de criminal. Eso asusta a Frank pero hace famoso a su álter ego justiciero. Libby empieza a sospechar que Frank es el enmascarado que ha estado atacando gente en las calles, pero en lugar de considerarlo un loco le parece algo genial. Vestido en su nuevo traje, Frank intenta rescatar a su esposa, pero fracasa y resulta herido, sin otro lugar a dónde ir, se refugia en el departamento de Libby.

Libby decide ayudar a Frank si a cambio la toma como su secuaz, sin estar muy de acuerdo Frank acepta y Libby se transforma en Bolty, la compañera de The Crimson Bolt. Aunque la idea de ser superhéroe de Bolty era algo extrema, pues resultó ser una verdadera maníaca que pretendía matar a cualquier delincuente por mínima que fuera su falta, además de que se había enamorado de Frank. Luego de conseguir un buen arsenal de armas Frank y Libby marchan hacia la casa de Jacques para recuperar a Sara y desatan una encarnizada batalla digna de competir con cualquier película de superhéroes.

La película inicia algo lenta aparentando ser un mal chiste y una película de baja calidad con el típico personaje fracasado, pero rápidamente evoluciona en una verdadera historia de superhéroes, con humor negro y algunos toques de gore. La pelea final que nos regalan Libby y Frank es completamente brutal e inesperada, épica de principio a fin y dramática en su desenlace, además de que nuestro protagonista evoluciona notablemente y nos regala una grandiosa reflexiona final que nos demuestra la madurez que alcanzó.

El filme es mucho más de lo que uno podría esperar en un inicio y eso es una agradable sorpresa que uno como espectador aprecia bastante. La película no intenta hace una crítica mordaz a la figura del héroe, de hecho se centra en las frustraciones del protagonista y nos deja una valiosa enseñanza: uno nunca va a estar completamente listo para nada, así que o lo haces o no lo haces. Sin duda una recomendación que puede no ser para todos pero que considero merece totalmente una oportunidad.