Kanojo to Kanojo no Neko

Título Original: 彼女と彼女の猫 (Kanojo to Kanojo no Neko).
Género(s): Drama, Romance, Kemono, Slice of Life.
Director: Makoto Shinkai.
Estudio: Creado totalmente por Makoto Shinkai.
Emisión: 1999.
Duración: 5 minutos.
Extras:

Kanojo to Kanojo no Neko (Ella y su Gato) es considerada la primera obra de Makoto Shinkai, aunque en realidad no lo es. Sin embargo, se ha convertido en un cortometraje de culto entre los seguidores del talentoso director, pues es el primer trabajo en que vemos de lleno el estilo tan particular que tiene para contar historias dramáticas en poco tiempo.

La animación resulta excelente, tomando en cuenta que tuvo que hacerla en blanco y negro para que su ordenador soportara y poner escenas muy cortas con poco movimiento. Y las voces originales que fueron puestas por él y su novia le agregan un valor por demás nostálgico muy apreciado por los fans.

La historia nos lleva por el día a día en la vida de una joven mujer a través de la narración de su gato, Chobi. Ambos llevan una vida tranquila y sin sobre saltos e intentan disfrutar de las cosas más insignificantes de la vida. Chobi se enamora de su dueña y esto le impide ver sus defectos, pero tampoco entiende del todo lo que pasa a su alrededor, lo único de lo que está realmente consiente es de sus sentimientos por ella.

En tan sólo 5 minutos el corto nos narra el más enternecedor y puro amor que puede sentirse por una persona, y no sólo es el hecho de que sea romántica lo que la hace atrayente, sino la cantidad de interpretaciones que se le pueden dar.

El existencialismo que maneja es muy importante, ya que nos muestra la vida triste y solitaria de la dueña de Chobi, a quien éste ve como la persona más maravillosa del mundo y por lo tanto como una persona feliz. También nos narra la cruda y triste realidad de la joven mujer, quien lleva una vida melancolía al igual que Mimi, la gatita novia de Chobi, quien a pesar de saber que éste ama a su dueña, se aferra a creer que tiene oportunidad de estar con él.

El estilo narrativo de la obra es algo que debemos resaltar, pues hace uso de la concepción shinto-budista al usar las cuatro estaciones del año como una metáfora de las etapas de la vida. Sin olvidar, claro, al animal como el personaje central de la historia. En fin, las interpretaciones en este cortometraje son innumerables, pero sin duda es un gran clásico que ejemplifica el potencial que su director mostraba desde sus primeras obras.