Zdzisław Beksínski es un artista plástico de origen polaco nacido en 1929 y fallecido en 2005. Sus obras muestran imágenes surreales y distorsionadas de pesadilla, y aunque él las denominaba barrocas o góticas, pertenecen al Realismo Fantástico. En la década de los 60 su trabajo empezó a ganar prestigio y a exhibirse en Varsobia. Para los años 70 y 80 Beksínski ya era un ícono del arte contemporáneo en su país y empezó a ganar una popularidad significativa en el resto de Europa, Estados Unidos e incluso Japón.
Sus obras son desesperanzadoras y aterradoras, dan miedo pero al mismo tiempo seducen. Son como esas cosas que te perturban pero que al mismo tiempo no puedes dejar de ver. El terror de su obra te hechiza como a aquella víctima que ante el peligro su única reacción es quedarse paralizada admirando la belleza de algo que es aterrador, letal, mortífero pero hermoso.
Las pinturas de Beksínski son tan evocadoras que de inmediato te transportan a una parte oscura de tu mente, donde vive lo malo y monstruoso, pero que no por ello deja de ser hermoso y hasta irresistible. Su obra es la belleza enclavada en el corazón mismo de tus pesadillas.